Expertos iraníes detectaron un nuevo ataque a los sistemas de su cuestionada central atómica. El año pasado el virus Stuxnet dio el primer gran golpe a la seguridad del régimen. "Afortunadamente, nuestros jóvenes científicos alcanzaron a descubrirlo y ahora el virus fue puesto bajo examen en laboratorio", precisó el jefe de una unidad militar responsable de combatir el sabotaje, Gholam Reza Jalali.
"Stars" es el segundo gusano espía que ataca a Irán en los últimos ocho meses. A finales del año pasado, un poderoso virus conocido como "Stuxnet" agredió las instalaciones nucleares del país y otros sitios industriales.
Teherán reconoció que Stuxnet afectó a un limitado número de centrifugadoras -un componente clave en la producción de combustible nuclear- ubicadas en su principal instalación de uranio enriquecido en la ciudad central de de Natanz.
Algunos expertos lo describieron como el primer "cibermisil guiado", que tenía como objetivo el programa atómico de Irán.
Frente al primer ataque, Teherán acusó a los Estados Unidos e Israel de crear el software maligno para golpear sistemas vinculados a los programas nucleares. En esta ocasión, aún no responsabilizó a nadie en particular.
A causa de sus programas nucleares, Irán mantiene desde hace años una disputa con las potencias occidentales y con Israel, que lo acusan de perseguir fines armamentistas, hecho que niega y sostiene que su desarrollo nuclear tiene fines pacíficos.